Si así de sencillo. La cruel guerra entre navegadores que estamos viendo –con nuevas versiones de Internet Explorer y Firefox, y mejoras en muchos otros—no hace sino beneficiar al usuario.

Pero ¿por qué es tan necesario dominar el terreno de los navegadores? La respuesta tiene diferentes vertientes, pero todas terminan en el mismo lugar: DINERO.

Para Microsoft, lograr que su supremacía en sistemas operativos se transforme en supremacía en el mercado de navegadores es vital para su estrategia de dominar el mercado de las búsquedas y así lograr un lugar preferente al momento de captar el dinero proveniente de los anunciantes. Ni más, ni menos.

Para Mozilla –con su Firefox—y Opera, por nombrar a dos de los más emblemáticos “independientes” el negocio lo pone Google, ya que este último ha firmado millonarios acuerdos para que su motor de búsquedas sea el pre-seleccionado. Chrome, le permite a Google aumentar ese beneficio, y ya con esos tres cuenta con más usuarios que Explorer. No se puede olvidar que el principal negocio de Google –a pesar de todo lo que hace—siguen siendo las búsquedas

Para Apple con Safari, el negocio no es tan bueno como se esperaba, pero igual siguen ganando. Mientras el iPhone se siga vendiendo como se vende, al igual que el iPad, contarán cada vez con una mayor participación de mercado, así no sea tan grande como la de los demás. Pero su ventaja mayor es que están muy bien ubicados en tecnologías móviles, y la fuerza de Apple no se puede subestimar –si lo dudan pregúntele a Adobe, que no las ha tenido fácil con flash.

Tener un browser dominante, abre las puertas a decidir que tecnología se soporta y cuál no, por lo que los fabricantes de software deben estar de buenas con los navegadores dominantes, más allá de cumplir los estándares. Microsoft jugó a esto mucho tiempo –aunque sin el éxito esperado—y Apple igual lo está haciendo con Adobe –por razones de seguridad, según dicen, pero si así fuera, deberían eliminar Quicktime, también.

Mientras tanto somos los usuarios los que ganamos. Los que han instalado el último Internet Explorer se habrán dado cuenta de las mejoras en velocidad e interfaz. El Firefox 4 vuela comparado a la versión 3.6. Los hackers se la ven cada vez más difícil para hacer phishing y otras trampas relacionadas con el browser. La tecnología avanza y se soporta aceleramiento gráfico por hardware en los nuevos navegadores.

Así que la próxima vez que te dirijas a hablandodeti.com con un browser de nueva generación, puedes estar seguro que las funcionalidades y mejoras que esa pieza de software lleva, están allí con la intención de hacerle ganar dinero al fabricante, y agradece que una competencia tan amplia exista en el mercado de los navegadores. Sino quizás aún estaríamos navegando con Internet Explorer 6.