Desde un principio he mantenido que la tableta de RIM, la Playbook, es una de las tabletas con mejor hardware en el mercado. Sin embargo las pocas aplicaciones disponibles y la limitación de conexión a la red sólo por wifi y por bluetooth via un teléfono Blackberry, unido al hecho de no contar con un cliente de correo electrónico independiente –la opción era conectarse al teléfono Blackberry y actuar como una “extensión del mismo—torpedearon el éxito que pudo haber logrado esta tableta entre el público consumidor.

Esta semana pasada RIM liberó una actualización de sistema que promete sobrepasar estas limitaciones –el Playbook OS 2.0– y darle nueva vida a la tableta existente. Está actualización, muy necesaria, permite que la tableta pueda ejecutar aplicaciones nativas de Android –pero previamente verificada por RIM— y brinda un nuevo cliente de correo –independiente del teléfono— así como una mayor integración con redes sociales. A primera vista, después de instalarlo en la tableta, y realizando una revisión junto a la gente de RIM, que amablemente brindó un taller a los periodistas en Venezuela para que conociéramos las bondades del nuevo sistema, el mismo parece superar las limitaciones señaladas, y añade algunas funcionalidades interesantes, especialmente para los usuarios de negocios. Entre estas funcionalidades una de las más atractivas resulta el uso del teléfono inteligente como apuntador remoto cuando se realizan presentaciones desde la tableta.

Pero la pregunta clave aquí no es si la actualización resuelve las limitaciones existentes, sino más bien, si la Playbook con esas correcciones es aún una tableta competente en el mercado. Sin duda alguna, para la mayoría de las aplicaciones empresariales basadas en la arquitectura Blackberry esta tableta sigue siendo ideal. En el mercado de consumidores, la Playbook aún cuenta con hardware competitivo: procesador de doble núcleo, funcionando a 1GHz –ligeramente debajo del promedio de las nuevas tabletas—capaz de reproducir video HD 1080p –aunque la resolución real sea de 1024×600 píxeles—y cámara frontal de 3 MP y trasera de 5 MP. Además ofrece salida HDMI mediante un sencillo cable –no por medio de una base de acople, como otras– lo que la convierte en una buena opción para usar como estación multimedia y realizar presentaciones.

Así que RIM deberá dedicar una buena cantidad de recursos –más allá del taller a la prensa, que es un buen comienzo—para evangelizar al mercado de que su tableta, lejos de ser un dispositivo “minusválido” al comparar se con otros, es aún hoy, a casi año y medio de su lanzamiento, una buena alternativa a la iPad –que puede sacudir de nuevo el mercado si dentro de una semana lanzan la iPad 3– y lograr que al hablar de opciones al momento de comprar una tableta, también estén hablandodeti, playbook.