La tormenta/huracán Sandy ha puesto a prueba los planes de contingencia del gobierno federal de los EE.UU., del gobierno local de casi 20 estados de EE.UU y de miles de empresas radicadas en esos estados y fuera de ellos.

Dos agencias de PR de talla mundial, una marca mediana de electrónica, un pequeño servicio de noticias, un par de empresas más y decenas de amigos, ha sido el saldo de “accidentados” en mi correo electrónico, la mayoría por contra con servidores ubicados en la costa Este de EE.UU. –de la cuál se ha demostrado que es tan vulnerable como la Oeste—sin contar con servidores de respaldo en otras locaciones.

A partir de Sandy estoy seguro que ofertas de email como las de Google y otras empresas de correo en la nube, serán evaluadas y adoptadas por cientos de CIOs en toda la costa este, ya que estos servicios si lograron mantenerse en pie. Y es que una cosa es no tener acceso a la Internet por un fallo local, y no poder leer el correo a tiempo, y otra muy distinta es que tu servidor de correo se apague o quede aislado y los correos se pierdan. Igual vale para sistemas ERP, CRM y cualquier otro sistema que maneje información crítica.

En muchas empresas quedará demostrado que los planes de contingencia con que cuentan son insuficientes, especialmente en empresas medianas, que no tienen centros de datos, sino simples cuartos de data, atestados de servidores, y los centros de datos de mayor tamaño recibirán muchos pedidos de cotizaciones para prestar servicios “en la nube”.

Al final, el gran conjunto de nubes que fue Sandy, no se retirará por completo sin antes dejar una gran lección a los de TI: usar la nube –de cómputo– te puede proteger de las consecuencias de las nubes reales.

Al comenzar esta tormenta me asombré por su tamaño y desarrollo, pero nunca pensé que estaría hablandodeti tormenta/huracán Sandy, desde estas páginas.