huaweitablet
Al recibir la invitación de la empresa Huawei para asistir al acto formal de entrega de unas 200 tabletas al Liceo Andrés Bello de la ciudad de Caracas, no puedo sentir más que alegría, ya que la educación asistida por tecnología siempre me ha entusiasmado, al punto que mi tesis para graduarme de Ingeniero en computación trato sobre ese tema.

Además de alegrarme por el gesto de los amigos de Huawei, este hecho e da oportunidad de expresar en este post algunas de las cosas que he estado pensando e investigando al respecto en los últimos meses.

Primero, la educación debe ser ante todo divertida, para que así sea más efectiva, logrando despertar el carácter lúdico de los alumnos. Esto además se aplica desde tempranas edades. Constantemente veo niños de menos de 10 años interactuando con tabletas propias o de sus padres, en aeropuertos, centros comerciales, fiestas e incluso vehículos. En mi casa la usuaria número uno de las 5 tabletas que tenemos es mi hija de 5 años. Es una usuaria intensiva y le resulta “natural” la interacción con el dispositivo.

Segundo, el uso de tabletas como vehículo de distribución de información puede ser muy conveniente. Herramientas de administración como las planteadas este pasado mes por Google, a través de Google Play for Education –que deberá estar disponible hacia finales de año—permiten que no sólo los profesores puedan hacer entrega automática de textos a las tabletas de los alumnos, sino que también ayudan a los docentes a generar aplicaciones educativas. Con el entorno de desarrollo adecuado, los docentes pueden generar aplicaciones educativas entretenidas, que se instalan directamente en las tabletas de sus alumnos. En mis tiempos de estudio, esos sistemas eran llamados sistemas autores –como el de m i tesis—y facilitaban la entrega de material didáctico e incluso los procesos de evaluación.

Tercero, las capacidades de las tabletas para fomentar el trabajo colaborativo, son esenciales para el nuevo mundo que vivimos. De video conferencias en adelante, pasando por los hanghouts de Google, el hacer “equipo” para un trabajo o el estudiar en grupos, puede cobrar un nuevo significado gracias a estas herramientas.

Por último, si hay escuelas interesadas en considerar el uso de tabletas dentro de sus aulas, les recomiendo enormemente visitar el sitio de prensa de la Universidad de Oxford, donde encontraran abundante material que los ayudará a decidir si se trata de una decisión adecuada, y en caso de ser así, les brindará mucho material de apoyo para desarrollar una estrategia educativa basada en dispositivos móviles y apps.

Ojalá las empresas de tecnología se monten en esta ola tal como lo están haciendo los amigos de Huawei en Venezuela, algo que además me ha permitido estar hablandodeti Huawei, así como hablando de los alumnos que a partir de mañana podrán recibir una educación más entretenida y moderna.